El Brexit: ¿mejorará la economía británica o la empeorará?
Los economistas británicos están divididos: hay previsiones optimistas y no tanto.
Si la economía británica mejorará o no después del Brexit nadie sabe la respuesta.
Mientras que algunas previsiones son optimistas otros economistas se esperan un escenario más bien negativo. Como decía, las previsiones están dividas.
Glosario del contenido del artículo:
Los optimistas a favor del Brexit
Hay economistas qué creen que con la salida de Reino Unido de la Unión Europea mejorará la perspectiva económica y que de hecho se incrementará su crecimiento en un punto porcentual durante 2020.
Según el acuerdo de Boris Johnson habrá un periodo de transacción de 11 meses en los que se seguirán manteniendo los acuerdos comerciales ya existentes entre Reino Unido y la Unión Europea.
Lo que suceda a largo plazo dependerá de los acuerdos comerciales que pueda negociar Londres con Bruselas y que se pactaran a finales de este año.
El ministro de Hacienda, Sajid Javid – por su parte- ha querido lanzar un mensaje esperanzador en el que declara que “el Brexit incrementará la confianza en la economía, y eso se traducirá en más inversiones y más creación de empleo. “
Por otro lado Julian Jessop, economista del Instituto de Asuntos Económicos, ha puntualizado que “la economía mejorará después del Brexit”.
Según él, el país crecerá un 1% más que si Reino Unido no hubiese salido de la UE pues este proceso político mejorará la confianza, traerá una mayor inversión empresarial y la libra esterlina subirá.
Esto significa que la tasa de crecimiento anual de 2020 superará de nuevo el 2%.
Los pesimistas superan a los optimistas
Por otro lado, están los británicos menos optimistas y qué temen esta desconexión con la UE, pues el país probablemente tendrá una peor relación comercial con la Unión Europea el próximo año, en 2021.
A los economistas británicos les inquieta qué esto pueda ser un factor para anular los beneficios de la salida pactada y que provoque un atasco en la economía que la mantenga ralentizada de forma permanente.
Como decía, la opinión respecto al futuro de Reino Unido a causa del Brexit está bastante dividida. Aunque sí podemos decir que hay muchos más que se inclinan por el peor escenario posible.
El optimismo de los partidarios del Brexit se ve cada vez más enturbiado por el pesimismo de los británicos que se oponen a esta causa, y que por cierto les superan por bastante en número.
El jefe del Centro para la Reforma Europea, John Springford, tiene muy claro que las expectativas que tienen muchos sobre que el Brexit mejorará la economía de Reino Unido no tiene ningún sentido.
El economista explica qué “no hay pruebas que demuestren que llegarán muchas inversiones’.
Insiste en que “la situación será bastante difícil y que se reducirá la actividad de las empresas que dependen de la libre circulación de personas o del comercio sin fricciones”
Los británicos coinciden: ‘hay incertidumbre’
Hay algo en lo que los economistas británicos coinciden, ya sean optimistas o no tanto acerca del Brexit.
Y es que hay mucha incertidumbre y ninguno puede saber, por muchas predicciones y expectativas que tengan, el efecto real qué tendrá este proceso en 2020, y sobre todo cómo evolucionará la situación económica de Reino Unido durante los próximos años.
A las incertidumbres del Brexit se suman la perspectiva de un aumento del gasto público para mediados del año y al hecho de que a causa de las tensiones comerciales a la economía mundial le esté costando tanto crecer últimamente.
Eso sin hablar de la nueva amenaza del coronavirus, qué está provocando una ralentización en la economía China y que probablemente afectará gravemente a la economía global.
Asimismo, también hay que tener en cuenta un posible rebote de la economía después del Brexit, que dependerá un poco de en qué medida haya afectado el referéndum a la economía.
Como dicen los expertos: mayor será el crecimiento potencial de la economía cuanto mayor sea el daño estimado. Y hoy por hoy las estimaciones sobre los efectos perjudiciales del referéndum están alrededor del 1% y el 3% del PIB (Producto Interior Bruto).
En cualquier caso la mayoría coincide en que la principal causa fue la caída de la libra esterlina, que sirvió para incrementar los precios de las importaciones y la inflación, pero en ningún caso los salarios de los británicos.
Los efectos del referéndum
Sí hablamos de precios, en un informe se detalla que el referéndum “incrementó los precios al consumo en un 2,9% y el gasto de los hogares británicos en 870 libras al año. “
En el caso de que la libra esterlina se recuperase está claro que los precios bajarían. Pero, por ahora los precios han subido un 3,5% frente a las principales divisas y su valor es un 8% menor que la media de los tres años anteriores al referéndum.
Sin embargo, a no ser que la libra continúe al alza los beneficios de la salida de Reino Unido de la Unión Europea serán más pequeños de lo que estiman los británicos más optimistas.
Por otro lado, también hay que comentar que el resultado del referéndum afectó a la inversión y confianza de las empresas. La inversión fue un 11% menor según el Banco de Inglaterra, y las ventas en el sector de la distribución fueron más débiles en enero porque no se produjo ningún rebote. Y eso a pesar de que las tasas de empleo superaron un record y se produjo un aumento en los salarios en 2019.
Sí analizamos toda esta información es poco probable que los datos económicos vean una recuperación antes de esta primavera, como pronto.
Y es que estos beneficios económicos de los que hablan los políticos derivados del Brexit no se conseguirán al menos hasta el segundo trimestre del año, y eso si lo hacen.
Así que solo nos queda esperar para ver sí el Brexit mejorará o empeorará la economía británica.
